El primer teniente de alcalde, Curro Martínez, y la concejala de Bienestar Social, María del Carmen Lara, han recibido en el salón de plenos del Ayuntamiento a los quince niños saharauis que participan en el programa “Vacaciones en Paz”, que pone en marcha la Asociación Amal Esperanza. En el acto también han estado presentes los portavoces del PP, Javier Bello, PSOE, Ángel González, Unión Portuense, Javier Botella, y Adelante Andalucía, Alejandro Gutiérrez, así como el edil de esta formación José Luis Bueno.
La concejala de Bienestar Social, María del Carmen Lara, se mostró encantada de recibir a los niños y calificó el día como “muy interesante para la ciudad y para mí”. “Tengo gran cariño al proyecto y agradezco la colaboración de las familias”, reseñó Lara, enfatizando que los pequeños “se lo merecen”.
El presidente de Amal Esperanza, Jesús Espinar, afirmó que los saharauis “llevan 43 años en el desierto más inhóspito del mundo” y denunció que padecen una situación a la que “no se quiere dar solución”. Espinar agradeció la colaboración de las familias y recordó que la iniciativa se lleva a cabo en El Puerto desde 1993.
Posteriormente Candela, una niña saharaui, leyó un cuento en representación de sus compañeros en el que se reivindica que quienes viven en los campos de refugiados vuelvan a su país de origen.
Tras la toma de palabra por parte de los portavoces cerró el acto el primer teniente de alcalde, Curro Martínez, quien destacó las bondades del programa “Vacaciones en Paz”, que incluye este año a quince niños, que se unen a otros cinco con discapacidad a quienes atiende Afanas. “Son ya 26 años de solidaridad en los que nuestro municipio se ha convertido en un hogar para estos niños durante los meses de verano”, explicó Martínez, quien agradeció el esfuerzo personal que realizan las familias portuenses en la acogida así como la iniciativa de Amal Esperanza, que atiende a pequeños de edades comprendidas entre los 10 y los 12 años, que viven en los Campamentos de Refugiados de Tinduf (Argelia), recalcando que “sitúa a El Puerto de Santa María en el mapa de la solidaridad”.