La portavoz del Equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Cádiz, Lorena Garrón, lamenta que el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno Bonilla, «prime los intereses de su partido a los de esta tierra». Una afirmación que sustenta en dos hechos: «Su ausencia del Pleno del Parlamento andaluz cuando se debatía sobre la gestión de Sanidad para ir a actos de campaña del Partido Popular en Castilla y León, y su visita a Bruselas siguiendo una campaña del PP contra la gestión de los fondos europeos para dejar a Andalucía a los pies de los caballos, lanzando una imagen de incapacidad total y poniendo en riesgo la llegada de nuevos fondos».
Ante esto, Garrón critica el «andalucismo totalmente impostado» del presidente del Gobierno andaluz, «para quien el partido siempre es la prioridad, por encima incluso del futuro y de los intereses de Andalucía». «Moreno Bonilla no se comporta como alguien que vela por los intereses de esta comunidad, sino como un ariete del PP en sus intereses electorales», añade.
Y asimismo, arremete contra el máximo mandatario de la Junta de Andalucía por «poner en peligro y dificultar la llegada de los fondos europeos a esta tierra, cuando es lo que realmente le conviene a Andalucía: que llegue nuevas partidas económicas y que se gestionen eficazmente».
La portavoz del Equipo de Gobierno teme que la actitud de Moreno Bonilla encierre «la intención de la Junta de privatizar la llegada de fondos europeos, dándole la gran mayoría, la inmensa mayoría al sector privado en vez de a los ayuntamientos y a las administraciones de la región». Al hilo, recuerda la eterna pugna entre la vieja política del ladrillazo y el pelotazo urbanístico que sigue promoviendo el PP, y ese abanico de nuevas oportunidades ligadas a la sostenibilidad que viene desde Europa y ante la que PP, Ciudadanos y VOX se resisten. «Eso es lo que subyace de toda esta estrategia de deslealtad con los intereses de Andalucía que está protagonizando el presidente de la Junta, ya enfundado en candidato del PP desde la obediencia nacional a las órdenes de Pablo Casado y Teodoro García Egea», sostiene.
Por último, Garrón lamenta que el presidente del Gobierno andaluz haya acudido a Bruselas a «destrozar la imagen de Andalucía recalcando que es incapaz de asumir fondos europeos, en un mensaje nefasto para el futuro de esta tierra». «Y todo -agrega- por una estrategia de partido, ya que ha demostrado que su andalucismo es una etiqueta de marketing».
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