-DESDE MI BANQUILLO:
– CÁDIZ C. F. 1 REAL MADRID 1
– La penúltima jornada del campeonato no se nos dio bien, no por el resultado, que empatar ante el campeón siempre es positivo, lo peor es que los resultados de los rivales no nos permiten depender de nosotros mismos en el último partido en Vitoria, ante un Deportivo Alavés descendido. Sus rivales con las matemáticas en la mano jugaran para ganar sus respectivos partidos, el Mallorca lo hará en el Sadar ante el Osasuna y el Granada en su campo ante un Espanyol ya salvado.
– La semana va a ser dura, porque habrá que trabajarla tratando de que los jugadores solo piensen en ganar, pero no será fácil que los futbolistas se olviden del partido de ayer contra el Real Madrid. un encuentro vital que merecimos ganar.
– Ante el campeón salimos con 1-4-4-2, con Ledesma en la portería, defensa de cuatro con Ajapo y El Pacha Espino en los laterales, pareja de centrales con Fali y Luis Hernández, en el centro del campo, Sobrino e Idrissi en las bandas y Alex Fdez y Alcaraz en el doble pivote, arriba Lucas Pérez y Negredo.
– El Madrid apostó por hacer cambios, sobre todo en la línea defensiva, en la portería salió a jugar Lunin y en la línea de cuatro defensas Ancelotti hizo jugar a Lucas Vázquez, Vallejo, Nacho y Militao, el resto del equipo lo formó con un centro del campo muy fuerte con Valverde, Casemiro y Kroos, y delante Asencio, Rodrygo y Mariano.
– El partido empezó de la peor manera para los nuestros ya que Rodrygo hizo una genial jugada partiendo de la banda izquierda, zafándose de todos los defensores que le salieron al paso sin que ninguno de ellos fuera capaz de pararlo antes de entrar en el área, dentro de ella sirve a Mariano para que este solo tenga que empujar el balón a la red. Tocó nada contra corriente para los nuestros pero supimos levantar la cabeza, aunque Asencio estuvo a punto de hacer el segundo, Ledesma muy acertado lo evitó con una gran parada. No cesó el Cádiz en su empeño y pudo hacer el empate pero Negredo ganándole la partido a Militao se interna en el área y estuvo demasiado generoso pasando mal a Lucas Pérez cuando él podría haber finalizado, el mal pase lo interceptó Nacho evitando el empate.
– Insistía el Cádiz con un Idrissi muy activo que estuvo a punto de hacer el empate pero Lunin sacó una mano milagrosa para salvar el gol, pero no perdonó Sobrino que ante un mal despeje de Militao hace el gol del empate. Tuvo el Cádiz el segundo antes de acabar la primera parte, pero otra vez la generosidad esta vez de Lucas Pérez con Negredo nos privó de ponernos por delante porque Lunin le ganó la partida al madrileño.
– La segunda parte fue para el Cádiz, desde el minuto uno, a pesar de que Ancelotti decidió mover el banquillo y de una tacada introdujo a Carvajal, Ceballos y Hazard.
También Sergio González hizo cambios dando entrada a Josemari por Alex Fdez, a Iza por Akapo que se lesionó en una durísima entrada de Hazard que debió ser expulsado. Pero era el Cádiz el que intentaba ganar. La jugada clave del partido vino después de que Militao no llegara a un balón que Lucas Pérez metió a Negredo en el área, Lunin derriba al delantero en el mano a mano y el árbitro no duda en señalar la pena máxima, es el propio Negredo quien la ejecuta, pero su remate flojo al lado izquierdo del portero es rechazado por este. Pero no se murieron ahí las ocasiones, otra vez Negredo no acierta a rematar un balón que se había quedado muerto en el área de meta, estaba claro que ayer no fue el día del delantero del Cádiz. Entró el Choco para los últimos minutos, un poco tarde para mi entender tal y como estaba el partido, pero no pudo ser.
– Toca preparar el partido de Vitoria como lo que es, una final, y esperar que uno, o los dos contendientes que luchan por lo mismo que nosotros empaten o pierdan y nosotros seamos capaces de ganar, no nos vale otra. Creo que ayer el Cádiz mereció ganar, sinceramente, pienso que fue más que el Real Madrid por el partido, pero no tuvo suerte, lo que tenga que ser será, pero que nunca se pierda la dignidad, vamos por los tres puntos del último partido y que por una vez la cara de la moneda nos caiga a nosotros y la cruz para uno de sus dos rivales en la lucha por la salvación.