El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha condenado este jueves el ataque «no provocado e injustificado» por parte de Rusia y ha resaltado que los socios y aliados «responderán de manera unida y decisiva» ante la decisión del presidente ruso, Vladimir Putin, de iniciar una operación militar en Ucrania.
«El presidente Putin ha elegido una guerra premeditada que traerá una pérdida catastrófica de vidas y sufrimiento humano. Solo Rusia es responsable de la muerte y destrucción que traerá este ataque», ha declarado, según recoge un comunicado de la Casa Blanca.
Biden ha explicado que se reunirá con sus homólogos del G7 en la mañana de este jueves y hablará con el pueblo estadounidense «para anunciar las consecuencias adicionales» que Estados Unidos y los socios impondrán a Rusia por «este acto innecesario de agresión contra Ucrania». «Nos coordinaremos con nuestros aliados de la OTAN para garantizar una respuesta fuerte y unida que disuada cualquier agresión contra la Alianza. Esta noche, Jill y yo oramos por el pueblo valiente y orgulloso de Ucrania», ha dicho.
Estados Unidos ha pedido a Rusia que regrese al diálogo y que mande de vuelta a sus tropas «antes de que sea demasiado tarde» durante una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU en Nueva York tras la solicitud de ayuda militar por parte de las autoproclamadas repúblicas de Donetsk y Lugansk.
«Regresen a sus fronteras. Envíen sus tropas, sus tanques y sus aviones de regreso a sus cuarteles y hangares. Y envíen a sus diplomáticos a la mesa de negociaciones. Aléjense del borde, antes de que sea demasiado tarde», ha dicho la representante de Estados Unidos ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield.
«Estamos aquí esta noche porque creemos, junto con Ucrania, que es inminente una mayor invasión a Ucrania por parte de Rusia», ha declarado, agregando que «es un momento peligroso» y que la reunión de emergencia se ha convocado para «pedirle a Rusia que se detenga».