La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha pedido este martes «sentido común» y «cordura» con los Presupuestos a escasas horas de la votación de las enmiendas de totalidad al proyecto de las nuevas cuentas públicas, y ha agradecido a Unidos Podemos su «reconocimiento» por el trabajo «riguroso» con los Presupuestos, que «recoge el espíritu de la moción de censura», abogando por «consolidar alianzas» con la formación de Unidos Podemos para seguir aprobando iniciativas.
Durante su intervención en el debate de enmiendas a la totalidad al proyecto de Presupuestos, ha compartido con Unidos Podemos la «necesidad de diálogo» y ha seguido apelando al «sentido común» y la «cordura» de cara a los Presupuestos, con independencia del pensamiento de cada grupo respecto a la vertebración territorial de España.
Montero ha insistido en la necesidad de que se tengan en cuenta las «ventajas» y «avances» de las nuevas cuentas públicas, y ha aprovechado para trasladar su «reconocimiento» a Unidos Podemos por su trabajo «técnico y riguroso» que ha permitido alcanzar un «buen acuerdo político», que «recoge el espíritu de la moción de censura» de recuperar derechos arrebatados, redistribuir la riqueza y propiciar un «cambio de rumbo».
Asimismo, ha destacado que el Gobierno ha cumplido el acuerdo presupuestario, tal y como se ha «chequeado» en varias reuniones, por lo que le ha transmitido al coordinador federal de IU y portavoz fiscal de Unidos Podemos, Alberto Garzón, la apuesta del Ejecutivo por «consolidar alianzas» entre ambas formaciones para seguir desarrollando políticas de «progreso, igualitarias, que pongan a las mujeres en el centro del debate político y que atienda los retos del modelo productivo, transición ecológica y cambio climático».
«Compartimos valores, proyectos que pueden ser discrepantes pero hemos tenido voluntad de llegar a consensos», ha valorado Montero, quien espera que las iniciativas pendientes que no tenían reflejo en las cuentas públicas lleguen al Congreso consensuadas.
«Desenmascarar la teatralización de las derechas»
También ha respondido a Garzón que el Gobierno «no va a renunciar a seguir mejorando la vida de los españoles, a blindar las políticas sociales, proteger a los más vulnerables y a hacer una redistribución justa de la riqueza».
Montero ha asegurado que el Ejecutivo seguirá impulsando el diálogo «como único camino posible para resolver situaciones de conflicto» y ha confiado en seguir trabajando con Podemos «con lealtad y responsabilidad para que España siga avanzando y no retroceda como quieren las derechas».
En este sentido, ha compartido con Garzón que las fuerzas progresistas están ante un momento «crítico» por la «ola neoliberal y de ultraderecha de tres cabezas», si bien ha opinado que «hay poca gente que en España quiera retroceder a épocas pasadas», por lo que frente a las fuerzas que buscan la «involución» de derechos, ha sostenido que las formaciones progresistas tienen que ser capaces de «desenmascarar toda la teatralización».
Previsible rechazo a los Presupuestos
El Pleno del Congreso tumbará hoy con toda probabilidad el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2019 con el triunfo de las enmiendas a la totalidad presentadas por varios grupos de la oposición, lo que puede forzar al Gobierno de Pedro Sánchez a adelantar las elecciones generales.
Los Presupuestos se enfrentan a las enmiendas a la totalidad del PP, Ciudadanos, Esquerra Republicana (ERC), PDeCAT, Coalición Canaria y Foro Asturias, que suman 185 votos, muy por encima de la mayoría absoluta. También UPN y Bildu han anunciado que no apoyarán las cuentas, lo que podría elevar la cifra a 189 votos.
Las enmiendas se votarán en una única votación (alrededor de las 13:00h), ya que todos piden lo mismo: la devolución de las cuentas al Gobierno. A sólo unas horas de la votación, el Ejecutivo socialista tiene comprometido el respaldo de Unidos Podemos, PNV y Compromís, mientras que Nuevas Canarias ha anunciado su abstención.
Para salvar su proyecto, los socialistas necesitan que los independentistas catalanes rectifiquen, retiren sus enmiendas de totalidad y voten también en contra de tumbar el proyecto.
Si no hay cambios en las filas independentistas, tal y como se prevé, el primer proyecto presupuestario de Sánchez será derribado, lo que desde la Constitución de 1978 sólo ha ocurrido en 1995, cuando el Gobierno de Felipe González vio devueltos sus Presupuestos al perder el respaldo de los nacionalistas de CiU.
En aquella ocasión, la retirada del apoyo de la formación de Jordi Pujol, ahora PDeCAT, provocó el adelanto de las elecciones generales a marzo de 1996, cita que supuso la derrota electoral del PSOE y que dio paso a ocho años de presidencia del PP con José María Aznar.