Habitualmente, como indican la Policía y la Guardia Civil, este tipo de estafas se lleva a cabo por ‘mafias’ organizadas. Son muy habituales las operaciones conjuntas entre ambos cuerpos de seguridad para desarticular bandas que se dedican al robo, manipulación y tráfico ilícito de vehículos, si bien no hay datos concretos para analizar si hay más o menos casos con el paso del tiempo. Las víctimas, al menos este año, ya son más de un centenar. En 2017, se vendieron en España un total de 1.964.277 coches usados, un 10% más que el año anterior, según los datos de la patronal de concesionarios, Faconauto.
Los que más se compran son coches usados de hasta tres años. Ese año fueron 366.583 unidades, un 21% más que el mismo periodo anterior. Se debe, explican, a que ha habido un sobrestock de coches jóvenes procedentes de automatriculaciones de los concesionarios y de empresas alquiladoras. Según Faconauto, esto ha coincidido además con un aumento de la demanda por parte de los compradores, que buscan adquirir esos coches a un precio más bajo.
La estafa más habitual es el trucaje del cuentakilómetros, según la Guardia Civil, y supone además, un mayor riesgo de averías y puede resultar incluso peligroso para la seguridad vial. “El kilometraje es un elemento esencial en la compraventa de un vehículo, en la medida en la que se vincula con el estado de conservación del mismo y con su precio en el mercado de ocasión, determinando de ese modo las prestaciones que fundamentalmente puede el comprador esperar de él”, detallan desde el Instituto Armado.
El «afeitado» del coche
Este tipo de trampa, conocido en el argot policial como ‘afeitado’, deja consecuencias nefastas no sólo a los compradores, que deben pagar más por un vehículo o afrontar más reparaciones de las debidas, sino para la propia seguridad vial e incluso para el medio ambiente, ya que se disparan las emisiones derivadas de la carburación dado el aumento de vida del vehículo “trucado”, causando un grave perjuicio, además, en la imagen del propio sector de la venta de vehículos de ocasión.
¿Qué hacer ante este tipo de estafa? Las autoridades recomiendan denunciar desde el primer momento. También solicitar hojas de reclamaciones en el caso de ser concesionarios, o poner en conocimiento del vendedor particular mediante escrito.